A tus enigmas
En mi estantería reposa el único mar
entre tú y yo.
Sin brisa, sin arena, sin olas, sin olor,
orillado solo de tinta y de ausencia.
Sin embargo, guarda el tesoro callado
de tu húmedo abordaje
de nuestro náufrago sueño.
De vez en cuando lo abro
y nado.
VERA